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miércoles, 15 de abril de 2015

Mi hermano

Cuantas veces le he hecho rabiar, le he contestado de mala manera, cuantas le he engañado aprovechándome de la diferencia de edad y cuantas le habré hecho llorar, lo que me ha partido el corazón verle así exclusivamente por mi culpa,  muchas de las veces sin razón. Cuantas veces le he amenazado y aunque ahora no lo recuerdo concretamente seguro que también le he golpeado alguna vez. Y él siempre me ha perdonado.

La relación entre hermanos es por lo común una constante de amor-odio hasta que se crece lo suficiente. Pero un odio(enfado más bien) instantáneo, del que no perdura más allá de unas horas porque sabes que quien tienes enfrente es la persona que más tiempo ha compartido contigo junto a tus padres, que te conoce desde crío y te ha visto crecer día a día, cambiar, madurar... Y lo más importante, te ha visto en todos los estados de ánimo posibles y los ha descifrado.

Recuerdo una noche especialmente, de hace unas semanas, en el que de madrugada me tumbé encima de la cama en medio de un llanto prolongado. Él se despertó y vino a cuidarme, me ordenó que me metiera entre las mantas, me consoló y arropó. Y al día siguiente no dijo nada sobre ello, porque el silencio es el mejor pacto entre hermanos cuando las palabras no solucionan nada ni son necesarias.

A pesar de todo lo que describía en el primer párrafo, una cosa tengo muy clara. Y es lo que canta perfectamente Suite Soprano en su canción Como hemos cambiado: "A mi me puede dañar cualquiera, ni el primero ni el último que me agrediera. Pero ten claro que si jodes a mi hermano...juro por Dios, te lanzo un tostador a la bañera" Y espero que él también lo tenga claro.

La mayoría de los que estáis leyendo esto ya le conocéis y a los que no, estáis tardando porque no tengo palabras para expresar lo orgulloso que estoy de él, algo que quizá nunca le haya dicho. A pesar de que nunca me ha hecho ni caso en mi insistencia para que no cometiera el mismo error que yo con el inglés, he contemplado como se ha moldeado con los años y no puedo estar más satisfecho. Admiro su tenacidad en el ámbito académico pero sobre todo fuera, en el terreno de juego real, en el de la vida. Continuamente con la sonrisa en la boca y con ganas de hacer reír al resto, más maduro siempre de lo que su edad determinaría, con unas tremendas ganas de vivir y teniendo claro lo que quiere en el futuro. Y una fiesta de nivel élite mundial, no se olvide.

Dicen que nos parecemos físicamente. No lo sé, creo que ninguno de los dos lo pensamos, pero lo que sí tengo claro es que nos parecemos en muchos otros aspectos aunque con personalidades muy diferentes. Él ha tenido que soportar la carga de heredar mis apodos y comparaciones por ser el hermano pequeño; espero que le haya sido leve porque tengo claro que él se merece ser reconocido por sí mismo y no por ser "el hermano de" ni el apodo jr. correspondiente.

Hoy es su cumpleaños. Y no sabía muy bien que regalarle. No solo materialmente sino un detalle de carácter más emotivo que siempre me gusta tener. Ya le he hecho montajes y collages suficientes así que he pensado que por qué no escribirle desde aquí. Nunca le había dedicado unas palabras y creo que es buen momento de hacerle saber lo que pienso de él y haceros saber al resto lo feliz que me hace tenerle a mi lado.

Felicidades Héctor, te lo mereces todo. Aquí me tienes siempre para ayudarte a conseguirlo.

MHES.

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